Finalizadas las vacaciones para muchos, como expertos en consultoría informática en Barcelona sabemos que llega el momento de plantearse si toca renovar los equipos. Arranca el nuevo curso y numerosas empresas se marcan como objetivo optimizar el funcionamiento de sus negocios sustituyendo los ordenadores. Pero… ¿sabemos cuál es el mejor procesador? Al ser una inversión importante que no debe decidirse a la ligera, desde TIC Solutions queremos darte una serie de pautas. Y es que tenemos tendencia a fijarnos en una unidad de medida, como los megapíxeles en las cámaras digitales, por ejemplo, y pensar que cuantas más unidades, mayor será el rendimiento del producto. Pero en el caso del PC, no vale esa máxima. Lo que importa es que el conjunto -la placa base, la memoria, el procesador…- funcione a la perfección y eso lleva a que no siempre un procesador con más velocidad vaya más rápido. Como verás enseguida, hay muchos aspectos que debes analizar, siempre en el segmento profesional, por supuesto, porque los procesadores para consumo se quedarán cortos.
Núcleos y frecuencia de funcionamiento
Las cifras que marquen estos elementos y la combinación de ambos valores tienen mucho que decir sobre el funcionamiento global del procesador. Los núcleos determinan el número de unidades de procesamiento central independientes, que pueden superar por mucho la decena y multiplicar de manera rápida la capacidad de trabajo; mientras la frecuencia de funcionamiento -expresada en megahercios- designa la frecuencia con la que trabajarán esos núcleos. En algunos casos, se ofrece un modo ‘turbo’ que aumenta el rendimiento cuando se detecta una sobrecarga de actividad que pone en riesgo la operatividad del aparato.
Multihilos y overclocking
En algunos procesadores, el trabajo de cada núcleo se divide en dos hilos, una circunstancia que puede resultarnos útil según lo que vayamos a requerirle al equipo informático. Como referentes en consultoría informática en Barcelona, también debemos tener en cuenta la posibilidad de realizar ‘overclocking’ o, lo que es lo mismo, regular el voltaje, potencia, núcleos y otros valores para aumentar el rendimiento del procesador. No todos los equipos lo permiten así que, si crees que necesitarás esta funcionalidad en tu empresa, tenlo en cuenta. En los modelos de la marca Intel sabremos que está habilitado este ajuste si llevan una K en su denominación, mientras AMD ofrece esta opción, por ejemplo, en sus procesadores Ryzen.
Memoria caché
La memoria caché guarda los datos que posteriormente se utilizarán así que cuanta más memoria caché tenga un procesador, más capacidad de datos podrá gestionar de forma óptima. Cuanto más alejada está la memoria caché de sus núcleos, mayor será su tamaño, pero más lento también acceder a ella. Una muestra de lo que te decíamos de que más unidades de medida no siempre suponen que te beneficies de un mejor funcionamiento.
Voltaje y consumo energético
Cuando hablamos del TDP (Thermal Design Power), nos referimos al promedio de energía en vatios que disipa el procesador trabajando con todos sus núcleos activos en la frecuencia base. Si necesitas mucha potencia, ten presente que suele acarrear un mayor voltaje y, por ende, también mayor consumo. Al contrario, cuanto menor es esa cifra, menor calentamiento sufre el procesador y menos pagarás en la factura. Es cuestión de analizar qué necesitas exactamente y elegir la mejor opción para tu empresa, y tu bolsillo. Como expertos en consultoría informática en Barcelona, podemos ayudarte a decidir.
Memoria compatible y zócalo
Si vas a comprar un procesador, ten en cuenta que ha de existir compatibilidad con la placa base y la memoria RAM. Cada modelo suele tener soporte para uno o varios tipos de memoria RAM así que has de fijarte bien en qué tipo de memoria está contemplada en la ficha técnica del procesador para asegurar la sintonía con los componentes actuales o con los que vayas a adquirir en el futuro.
También debes ver qué tipo de zócalo es compatible con tu nuevo procesador, esto es, cuáles son las conexiones eléctricas y mecánicas que existen entre el procesador y la placa base, tanto si quieres actualizar tus equipos informáticos sin comprar una nueva placa como si deseas renovar también este elemento.
Por nuestra larga trayectoria en consultoría informática en Barcelona, sabemos que la decisión sobre cuál es el mejor procesador para tu empresa no es sencilla de tomar, por el presupuesto que requiere. Con todo, queremos tranquilizarte porque, en muchos casos, bastará con cambiar la pieza adecuada para ganar más potencia de trabajo sin un gran dispendio. Si no es así, y toca comprar procesador, reiteramos que más velocidad no siempre significa mayor rendimiento y que lo imprescindible es no solo evaluar bien qué le vas a exigir sino también la compatibilidad entre todos los componentes. Confía en TIC Solutions, expertos también en mantenimiento informático, porque encontraremos la mejor solución a tus necesidades.
